Inicia en el Arco de Constantino, uno de los arcos triunfales mejor conservados de Roma. Caminarás hasta el Coliseo y subirás al tercer nivel, abierto después de la renovación, que ofrece una vista espectacular de toda la estructura y de toda Roma. Descenderás para ver la Porta Libitinaria, la puerta por la que los gladiadores entraban a la arena y, si eran eliminados, a través de la cual retiraban sus cuerpos. Verás el hipogeo, los túneles subterráneos donde los esclavos y las bestias salvajes permanecían antes de los violentos espectáculos y donde los gladiadores se preparaban para el combate. Caminarás por el Foro Romano y los Foros Imperiales, antiguos centros de vida religiosa y política, y por la colina del Palatino, residencia de los emperadores, con sus increíbles vistas.